martes, febrero 07, 2006

17

La mujer se acerca de nuevo hacia Pacheco, y este clava en el cuello de la misma un gran pedazo de vidrio, justo en la garganta. El liquido ocre que brota de la herida empapa el pecho de Pacheco, quien maltrecho se pone en pie para continuar la huida. Al pasar por el mostrador ve de reojo al encargado, tal cual partido en dos, y sin pensarlo se pasa atrás de la barra para tomar la escopeta del fallecido. La EE recuperada de la agresión con el vidrio, se acerca a la barra, solo para recibir en pleno rostro un fogonazo a quemarropa que le atraviesa el rostro, quemándole el prominente bigotazo que se carga. Pacheco salta la barra y sale del hotel por la puerta principal. Las agentes que se quedaron atrás llegan a la recepción y ayudan a la del escopetazo a ponerse en pie. Todas salen a la calle tras Pacheco.

Nuestro héroe trata de correr, pero esta muy golpeado, así que sin pensarlo se baja de la banqueta y a punta de escopeta despoja al primer inocente que topa de su vehiculo, que para su mala suerte es un datsuncito color verde del año 81, automático pa acabarla de amolar. Mientras el dueño le mienta la madre, Pacheco pisa el acelerador a fondo. El auto cascabelea y se ahoga pero empieza acelerar con desatino, de súbito una agente de la EE salta al frente del auto y se prende del parabrisas, el cual de un puñetazo revienta. –“Mierdamierdamierda”- es lo único que pasa por la mente de Pachi-Pachi al tiempo que dispara contra la pseudo-fémina, quien sin inmutarse arranca el volante. El auto, golpea contra la barda de contención perdiendo el control, para ir a estrellarse contra el aparador de una farmacia similar que esta sobre tlalpan a la altura del metro General Anaya. El auto barre con los anaqueles y no se detiene sino hasta que se estrella con la pared del fondo del local.
Pacheco, un tanto aturdido por el golpe baja del auto entre el desconcierto de los vendedores de la farmacia. Alguien trata de acercarse para hacérsela de Jamón, pero al notar la escopeta retrocede. El torso de la mujer de la EE esta aprisionado entre el auto y la pared, pero sus extremidades, cercenadas por el impacto, han empezado a formar nuevas agentes. Los empleados de la farmacia huyen aterrorizados al apreciar el fenómeno.
La primer nueva agente se levanta, Pacheco, casi noqueado, dispara sin apuntar, obviamente falla, el disparo hace estallar los frascos que hay en un anaquel, embarrando todo lo que hay cerca de ellos. Un líquido blanco y cremoso cae sobre la bestia bigotona, la cual grita de dolor al tiempo que se lleva las manos al rostro. El liquido blanco empieza a humear sobre la mujer, formando llagas que se van haciendo enormes boquetes babosos, y como por arte de magia, el engendro se desintegra, dejando solo un apestoso amasijo verde ocre.
Pacheco no da crédito a lo que acaba de ver, rápidamente se acerca al anaquel de donde emano ese milagroso líquido, pero solo hay pedazos de vidrio y plástico regados por todos lados, al fin encuentra un pedazo de envase que conserva una porción de la etiqueta, mas cuando se dispone a leerlo, la segunda agente lo golpea en la cabeza noqueándolo de inmediato... mierdamierdamierda